La mortalidad materna es la principal causa de muerte entre mujeres en edad reproductiva a nivel global: a pesar de que las cifras han disminuido a nivel mundial -reduciéndose en un 45% desde 1990- aún hay desafíos que producen complicaciones para la mujer tanto en la etapa de gestación como en el parto.
Según estimaciones mundiales, indican que cada día se producen, aproximadamente, 810 muertes maternas, 1 muerte fetal cada 16 segundos, 2.4 millones de muertes neonatales cada año, y 1 de cada 5 mujeres da a luz sin contar con la asistencia de un/a proveedor/a de salud con las competencias necesarias.
Un aspecto importante es el hecho de que en el mundo más de 15 millones de niñas, entre los 15 y 19 años de edad, tienen un hijo o hija cada año. Una de cada cinco niñas es menor de 18, lo cual eleva el riesgo de mortalidad materna. Aún queda mucho por hacer para prevenir los embarazos en adolescentes y las infecciones de transmisión sexual. Se registran 33 muertes maternas por hora, lo cual continúa siendo un número inaceptable, especialmente por la evitabilidad de la mortalidad materna.
Las muertes maternas evitables siguen siendo un indicador de desarrollo y desigualdades sociales, porque en las poblaciones más dejadas atrás, sigue siendo un fenómeno frecuente.¡
El UNFPA tiene como objetivo reducir las inequidades en los sistemas nacionales de salud, ampliando el acceso a estos servicios, especialmente para las poblaciones más vulnerables. Además, trabaja para fortalecer el empoderamiento de las mujeres, garantizando su acceso a la salud materna, y promoviendo el bienestar integral de todas las personas como un eje fundamental de su estrategia.
El fortalecimiento del programa de obstétricas/os es otro de los componentes claves, para eliminar estas brechas y garantizar que todas las mujeres tengan acceso a servicios sexuales, reproductivos, maternos y neonatales.