Esta herramienta se ocupa del rol de la persona adulta con capacidad de proteger y contribuir a encontrar respuestas que garanticen la salud integral y los derechos de las niñas y adolescentes.
Es la cuarta de las seis herramientas de intervención que forman parte de la de la serie “Niñas y adolescentes embarazadas en contextos abusivos”. Cada una presenta lineamientos orientativos destinados a equipos de salud, que incluye recomendaciones y puntualizaciones.
Su carácter de lineamientos flexibiliza su aplicación en función de la enorme variabilidad de circunstancias en las que se presentan los casos, sin perder la especificidad y rigurosidad que la problemática exige. Se trata de fundamentar criterios de intervención, más que determinar pasos y momentos rígidamente formalizados.