*Prólogo por Mariana Isasi, Jefa de Oficina de UNFPA Argentina 

La generación de evidencia para la toma de decisiones, especialmente en las políticas públicas, es una de las líneas de trabajo fundamentales del Fondo de Población de las Naciones Unidas en Argentina y en el mundo. En pos de avanzar en ese sentido, creamos el dispositivo “Juntando Saberes”, que busca justamente tender un puente entre aquellos conocimientos generados desde la academia y quienes son responsables de decidir y gestionar las políticas públicas. Contamos con antecedentes: ya realizamos esta experiencia en dos oportunidades, una para intercambiar sobre el Consenso de Montevideo y otra sobre fecundidad adolescente.

En esta edición hemos decidido, junto con la Dirección de la Mujer y Asuntos de Género del Ministerio del Exterior y Culto de la Argentina, enfocarnos en un tema que de a poco se va instalando en la agenda pública pero que creemos que merece mayor atención: la intersección entre masculinidades y salud. Los objetivos que nos planteamos son: impulsar la agenda sobre masculinidades y salud; fomentar el diálogo entre estudiosos/as de la temática y quienes llevan adelante la toma de decisiones; promover estudios adicionales; y la creación y consolidación de un espacio de intercambio que permita la puesta en común de los resultados obtenidos en diversas investigaciones para posibilitar una agenda de prioridades y mejorar la implementación de políticas públicas dirigidas a reducir la mortalidad de los varones y contribuir a la erradicación de la violencia de género.

Durante muchos años nos hemos centrado en dar respuesta a las mujeres que se encuentran en situación de violencia, y esto tiene su razón de ser: se requieren acciones necesarias y urgentes. Sin embargo, en una mirada de mediano y largo plazo es necesario también modificar las pautas culturales machistas que permiten la violencia y que, además, tienen una influencia sobre las vidas (y las muertes) de los varones. Se trata de preguntarse por qué los varones, que mueren antes y muchas veces por causas violentas, son un riesgo para sí mismos, para las mujeres (violencia de género, abuso sexual, falta de participación en la anticoncepción y en los cuidados) y para otros varones (legitimación de la burla, presión y violencia).

La jornada “Juntando saberes” también permitió que quienes se encuentran en puestos de decisión pudieran plantear sus necesidades para la implementación de políticas públicas.

Esta publicación sintetiza los intercambios realizados y el puntapié inicial para avanzar en la generación de evidencias en lo que respecta a las masculinidades y la salud. Desde el Fondo de Población de las Naciones Unidas, asumimos el compromiso de continuar profundizando las investigaciones en esta área y seguir “juntando saberes”.